Joaquín Anaut fue uno de los pastores roncaleses más afectado por Camille, el oso pardo que visitó Navarra durante doce años. Hablamos con él de osos, pastoreo, y del futuro de la vida rural.

Como las golondrinas, en esta ruta nos aventuramos hasta la frontera entre Francia y España. En el Arrakogoiti se contempla el espectáculo verde del valle. A la vuelta, y antes de visitar el dolmen de Arrako, comemos unas buenas migas en la Venta de Juan Pito.

Miguel Olza no fue solo uno de los cientos de toreros que surgieron en los años 20, edad de oro de la lidia. Vaquerín había nacido en el pueblo de Muguetajarra y paseó este nombre por las plazas de media España.

Zoroquiain es un pueblo navarro deshabitado. Errekazar, un grupo de 15 adultos y cinco niños luchan contra el olvido de esta aldea en el valle de Unciti. Dos ejes son los que les motivan a reconstruir un pueblo casi desde cero: recuperar su historia y la eco-construcción.

Los destinos de esta ruta son la senda de Camille y la reserva de Aztaparreta. La carretera NA-2000 nos lleva a la senda que recorrió el oso Camille. Pasado el refugio de Linza, nos abrimos paso entre las hayas y abetos de Aztaparreta para alcanzar la cima del Txamantxoia.

A principios del siglo XX el valle pirenaico del Roncal era inaccesible. Muchas jóvenes emigraban a pie a la vecina Francia por necesidad. Iban en octubre a trabajar en las fábricas de Alpargatas de Mauléon. Volvían por primavera. Eran golondrinas.

En 1954, la colina de Gorramendi se convirtió en el emplazamiento de una de las bases militares que los norteamericanos instalaron en España durante la Guerra Fría. Veinte años después, el gobierno español dinamitó la base y los militares estadounidenses desaparecieron de allí sin dejar rastro..

Desiderio Martínez fue uno de los últimos habitantes que nació en Beroiz, pueblo que actualmente está deshabitado. Vivió allí 26 años, hasta 1956.