Elizondo, la capital del valle de Baztán, es el lugar del que Amaia Salazar huyó en su juventud al mudarse a Pamplona. Sin embargo, una serie de crímenes hacen regresar a la inspectora para enfrentarse a su pasado y a un asesino que deja un rastro de cadáveres de adolescentes en las orillas del río Baztán. Se trata de una trilogía dentro del género de novela negra impregnada de la historia, los lugares y la mitología del valle, resultado de un arduo proceso de documentación por parte de la donostiarra Dolores Redondo Meira. Juan Mari Okindol, que relaliza las visitas guiadas, nos cuenta cómo Elizondo y el valle del Baztán inspiraron a Dolores Redondo y cómo la Trilogía del Baztán influyó en ellos.

“Amaia sentía en aquel bosque presencias tan palpables que resultaba fácil aceptar una cultura druida, un poder del árbol por encima del hombre, y evocar el tiempo en que en aquellos lugares y en todo valle la comunión entre seres mágicos y humanos fue religión”. (Páginas 83 – 84).

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